¿Quién alguna vez no fue ciego?.. ciego de no querer mirar lo que le hace mal, de no querer admitir la perdida, ciego de no querer dar paso a la resignación. Las personas que te quieren te lo advierten, intentan mostrarte la venda que llevas en los ojos, pero vos continuas igual, te lastimas una y otra vez, algunos te dicen que al lastimarte aprendes.. pero yo por ejemplo, todavía no sé que aprendí, sigo jugando a lo mismo sabiendo, siendo conciente del mal que provoca dentro mio, hay días que no lo soporto, otros que lo lloro, y otros tanto que simplemente convivo con él, pero todo esto ya es un circulo vicioso y, obsesivo, que jamás termina, todo por él, por él, que viene y va cuando quiere, me trata bien o me trata mal según lo que en el momento le conviene, es mi caso. El dolor consume, el dolor nos ahoga y.. ¿Qué hacer con eso si no queres terminar esa historia?, si es que se puede llamar historia, tal vez para tu corazon es historia, pero para él es una aventura o en algunos casos la nada misma.